¡Ya estamos en junio!
Echamos la vista hacia atrás para tomar perspectiva de los dos meses que llevamos impulsando nuestra transformación digital y parece increíble.
¡Hemos avanzado muchísimo!
La única manera de avanzar en la incertidumbre es atreverte a dar el primer paso.
Desde la barrera es muy fácil opinar. Demasiado.
Es lo que les pasa a muchos expertos de un mundo que ya no existe.
Hacen mucho ruido mediático, pero están muy lejos de saber qué es lo que funciona y lo que no.
Cuando pones el foco en dar soluciones y las fórmulas antiguas ya no dan resultados, es que el cambio es imprescindible.
Innovar supone admitir que en el contexto actual pueden funcionar cosas que ya habías probado sin éxito en el pasado. De la misma forma que muchas cosas que habían funcionado en el pasado han dejado de hacerlo.
Nosotros siempre buscamos soluciones para nuestros clientes.
Y para predicar con el ejemplo hemos impulsado nuestra transformación digital.
Para seguir ayudando a personas que dirigen empresas a transformar sus negocios y hacerlos sostenibles tomando decisiones con sus datos, es imprescindible que nosotros también lo hagamos.
Experimentamos cada semana con nuestros nuevos procesos digitales. De captación y de entrega de proyectos.
Experimentamos cada semana con la parte más difícil. Cambiar el marco mental y llenar la agenda de nuevas rutinas.
Se lleva mucho mejor cuando recibes ayuda de alguien de fuera de tu organización.
Cuesta ver lo que no ves si alguien no te cambia la perspectiva y la mirada.
Es la era de la colaboración.
Tenemos la suerte de estar participando en un Programa formativo que la Secretaria General de Industria y Pymes ha puesto en marcha a través de la Escuela de Organización Industrial. Es una de las colaboraciones externas que son clave. El director en Catalunya es Angel Alba de Innolandia. Toni está encantado con la primera parte del Programa, que empezó el pasado 18 de mayo y que durará hasta finales de julio. El objetivo es acabar con la definición del Plan de transformación digital para implantar en la empresa. Nosotros ya lo tenemos en la cabeza.
La ayuda de los mentores será clave para encajar todas las piezas de lo que ya sabemos que deberíamos hacer, pero que nuestras inercias y nuestra rutina son las barreras contra las que debemos luchar cada día. En la economía de la colaboración, los resultados se consiguen más fácilmente con la mentalidad de sumar funcionando como redes de conocimiento que se conectan para multiplicar valor.
Empezar nuestra transformación fue una decisión que tomamos y que compartimos el 14-abr-20. La fecha no engaña. Fue una decisión provocada por la situación de confinamiento, y la pérdida de proyectos que estaban en marcha y otros a punto de empezar.
Dejar de lamentarnos y tomar decisiones hacia la incertidumbre del futuro es el camino para seguir.
Más estrategia, menos planificación, más decisiones y mayor agilidad en la acción.
¡Seguimos!
