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De consultora financiera a emprendedora digital

¿Cómo hemos llegado hasta aquí? El origen queda ya muy lejos en el tiempo, pero lo recuerdo perfectamente.

Cuando empecé a hacer trabajos de financiera como freelance, enseguida me di cuenta de que lo que yo había aprendido trabajando en grandes empresas servía de muy poco para gestionar la tesorería de una pyme.

Lo que había aprendido de finanzas era la base del conocimiento, pero al cambiar el contexto no servía para resolver problemas.

Fui haciendo mi propia investigación de cómo debían organizarse de forma sencilla los procesos financieros de una empresa para evitar problemas de liquidez. Creé mi propio método adaptado a la realidad de las pymes a medida que experimentaba con un cliente. Era un grupo de empresas que crecía a una tasa desmedida como consecuencia de la expansión constructiva de la primera década del siglo. Cuando conseguí que el método funcionara, estalló la crisis financiera del 2008.

Cuando eres financiero eres el que recibe las consecuencias de las decisiones sobre el negocio y que se acaban trasladando en que la tesorería fluya… o que no.

Ser financiero en una pyme con problemas de tesorería puede convertirse en un infierno

Tiene el agravante de ser una pesadilla invisible que se sufre en soledad. Todo el mundo da por hecho que el día que toca se van a pagar las nóminas.  Y cuando hay algún problema… ¿Quién va a ser el culpable? ¡El financiero!

Porque debería haberlo previsto

Porque debería haberse anticipado

Porque debería haberlo gestionado de cualquier otro modo

Porque debería haberlo comunicado

Porque…

¡Porque la culpa debe ser de alguien!

El financiero siempre es la figura más oportuna para hacerlo.

Las personas no atendemos a muchas razones cuando se trata de los básicos. Necesitamos poder enfadarnos con alguien…

Como el financiero es responsable y no quiere tener estos problemas con sus compañeros, antes de llegar a esta fecha fatídica, pasa todos los días hablando con distintas entidades financieras, buscando alternativas de financiación, hablando con proveedores para aplazar posibles pagos, reclamando cobros retrasados de clientes…  

La conclusión es que cuando la tesorería se atasca porque cualquier causa, el financiero acaba haciendo tareas que no haría falta hacer si los flujos de líquido no estuvieran “bloqueados” por causas que normalmente están fuera de su ámbito de acción e influencia.

El triste destino de ser financiero de una pyme es que cuando hace un trabajo excelente y las finanzas están sanas, nadie lo ve y no se le reconoce.

Cuando las finanzas no están sanas, se sienten culpables, o peor, les hacen sentirse culpables…

Ser financiero en una empresa es un trabajo

Para ser consultor financiero hay que ser analítico y también emprendedor.

¡Es una combinación extraña!

Emprender haciendo proyectos de consultoría de estrategia y finanzas surgió de la necesidad de crear un sistema que funcionara y que nos permitiera crecer en clientes entregándoles mucho valor.

El año pasado dimos un salto a nuestro método con una solución tecnológica que facilita el proceso de análisis de datos que hacemos para entregar valor a nuestros clientes. Trabajamos duro durante muchos meses creando la solución idónea para nosotros como consultores.
Entendimos lo que es poner la tecnología a multiplicar el valor creado para el cliente.

Porque para ayudar a personas que tienen empresas con las finanzas de sus negocios y que puedas vivir de ello, tienes que trabajar con más de una. Tienes que captar clientes conscientes de sus riesgos.

Para poder hacerlo con éxito, necesitas un método para poder trabajar por proyectos y un sistema para gestionarlos.

El camino de nuestro aprendizaje ha sido mucho más de dar tumbos que de seguir una hoja de ruta.

La buena noticia es que, mirando hacia atrás, sí que podemos definir la ruta de la transformación que debería seguir alguien que quiera ayudar a personas que dirigen empresas a que mejoren resultados y el ciclo de generación de tesorería.

En este momento es más oportuno que nunca amplificar el impacto de nuestro aprendizaje y nuestra experiencia.

Ahora, queremos seguir multiplicando valor enseñando nuestro método a otros asesores y consultores que quieran ser más efectivos ayudando a sus clientes a mejorar sus resultados y sus finanzas.

Si te quieres apuntar a una charla estratégica conmigo, te explicaré cuales son los primeros pasos para crear proyectos de valor en tu negocio. Puedes hacer click aquí

¡Seguimos!