La transformación digital, es, sobre todo, transformación.
Es cambiar, y no dejar de cambiar.
La estrategia de esperar que “el futuro será mejor”, no es una estrategia
Si diriges tu propio negocio y tienes la responsabilidad sobre un equipo de personas, asúmela y lidera el cambio.
Cambiar es una decisión personal. No es delegable. Si lideras el cambio, otros te seguirán. Si no lo hacen, puedes cambiar de socios o puedes cambiar de opciones. El cambio siempre será difícil, porque hagas lo que hagas, siempre habrá personas que se van a oponer.
Empodera a las personas de tu confianza. Seguro que tienes muy cerca a personas a las que posiblemente no han tenido las oportunidades que estén alineadas con sus aspiraciones Escúchalas y dales apoyo para que tengan la oportunidad de conseguir estas aspiraciones.
Tienes que cruzar la línea. Todos actuamos como si existiera una línea dibujada en el horizonte que nos marca el límite de aquello que conocemos. Atrévete y cruza la línea. No esperes que alguien te de permiso.
Cuando lo hagas, otros te seguirán. Pasaran cosas.
Aprovecha la inercia.
Una vez lo hayas hecho, tendrás que seguir actuando para cambiar. Desafíate a fracasar, a aprender de esos fracasos y cuando hayas conseguido ese nuevo reto, desafíate a lograr retos mayores.
La verdad es que la mayor barrera es la sensación de miedo a atravesar una raya que no sabemos dónde está hasta que no la hemos cruzado. La mayoría de las veces no responde a un riesgo real.
Para afrontar la transformación de tu negocio, deja de pensar que necesitas personas que estén orientadas al cambio, y empieza por cambiar tu.
✅ Empieza tú, cruza la línea y lidera el cambio.